Es una subespecialidad de la oftalmología que se encarga de corregir todos aquellos problemas, ya sean estéticos o funcionales, que afectan a las estructuras que rodean los ojos: párpados, vía lagrimal y órbita.
Los párpados y el globo ocular están conectados por diferentes estructuras anatómicas y por diferentes nervios. Esta compleja y estrecha relación es el origen de la Cirugía Plástica Ocular.
Los párpados tienen una función muy importante de protección del globo ocular, y además son responsables en gran medida del aspecto estético de los ojos y de la expresión del estado de ánimo y de las emociones.
Unos párpados alterados por un accidente, una enfermedad o el envejecimiento, pueden provocar problemas psicológicos y dificultar la normal interacción con otras personas.
La cirugía plástica ocular moldea y reconstruye los párpados para corregir las alteraciones que originan el envejecimiento, traumatismos o enfermedades.
La cirugía más frecuente es la corrección del párpado caído y las bolsas por los cambios provocados por el envejecimiento, que provocan una mirada más cansada y triste. También existen enfermedades con alteración de la posición de los párpados (entropión, ectropión, ptosis, lagoftalmos,…) y tumores tanto benignos como malignos.
Las técnicas quirúrgicas propias de la cirugía plástica ocular intentan corregir las alteraciones de los párpados buscando el mejor resultado funcional y estético. Se utilizan técnicas de microcirugía y cirugía mínimamente invasiva, con incisiones pequeñas ocultas en los pliegues naturales de la piel o en la conjuntiva, por dentro del párpado.
Es la cirugía que corrige los cambios en los párpados provocados por el envejecimiento. Con esta cirugía se elimina el exceso de piel, músculo y grasa, que provocan una mirada más cansada y triste, además de una sensación de pesadez e incluso dificultad para abrir los ojos.
Habitualmente la cirugía se realiza bajo anestesia local con sedación y sin ingreso hospitalario. Es posible realizar una cirugía personalizada para corregir los cambios provocados por el paso del tiempo, sin cambiar los rasgos de siempre y con mínimos riesgos.
La blefaroplastia es la operación de párpados más común y es completamente segura. El cirujano busca la mejora estética del paciente, pero siempre considerando prioritaria la función del ojo y de sus estructuras faciales anexas. De hecho, los problemas de exceso de piel en los párpados también pueden interferir en el campo de visión del paciente, que se recupera después de la operación.
El oftalmólogo especialista en Cirugía Plástica Ocular conoce la anatomía y fisiología tanto del ojo como de los párpados, y está formado en microcirugía mínimamente invasiva, por lo que puede lograr un buen resultado estético con mínimos riesgos, sin alterar la importante función de protección del globo ocular, logrando una gran armonía entre estética y funcionalidad.
Oculis cuenta con una Unidad de Cirugía Plástica Ocular con oftalmólogos especializados en cirugía de párpados.
Sobre la blefaroplastia:
La duración de la intervención de cirugía de párpados oscila entre los 60 minutos, si se trata de un párpado, y los 90 minutos, si son ambos, aunque puede variar ligeramente en función de la corrección a realizar.
La blefaroplastia se suele realizar con anestesia local. Se realiza en régimen ambulatorio sin ingreso.
La recuperación es muy rápida y el postoperatorio en su conjunto se tolera fácilmente. La mayoría de pacientes pueden realizar sus tareas con total normalidad al cabo de 2 o 3 días.
Los resultados tardan entre dos y cuatro semanas en ser visible, cuando desaparece la inflamación y el edema.
Los efectos se mantienen a largo.
No hay una edad determinada, aunque a partir de los 40 años es cuando suele empezar.
